
Más de 200.000 fieles llegados de todos los rincones del mundo se congregaron el domingo 18 de mayo en la plaza de San Pedro para asistir a la misa con la que se ha abierto el pontificado del Papa León XIV. La celebración comenzó a las 10 de la mañana, aunque cerca de una hora antes, León XIV recorrió la plaza y la Via della Conciliazione a bordo del ‘papamóvil’ para saludar a los fieles, que lo vitoreaban y aplaudían a su paso, mientras el Pontífice les dedicaba bendiciones y sonrisas. “¡Viva el Papa!” y “¡León, León!”, se escuchaba a su paso, en diferentes idiomas.
La misa tuvo lugar a los pies de la basílica de San Pedro y el momento más importante se produjo cuando el Papa recibió, emocionado, el Palio y el Anillo del Pescador, los símbolos de su poder que marcan el inicio de su magisterio. León XIV recibió en primer lugar el palio, que es una estola de lana blanca que representa el peso del ‘rebaño’ sobre los hombros del pastor, decorada con seis cruces negras de seda y enganchado con tres agujas que representan los clavos de la Cruz. El Anillo representa su vínculo con Pedro, fundador de la iglesia, y lo llevará en su mano siempre. El nuevo pontífice se mostró conmovido cuando el cardenal filipino Luis Antonio Tagle le impuso el anillo en la mano. En ese momento la plaza de San Pedro estalló en un gran aplauso coral cargado de fe, alegría y esperanza. Las lágrimas asomaban a los ojos de muchos fieles mientras aplaudían al Papa León XIV, bajo un sol espléndido en este domingo de primavera. María José Miranda, viene de Torremolinos, Málaga, España, es una mujer de 73 años cargada de energía. Ha venido por el Jubileo de las Cofradías y lleva en la plaza desde las 5 de la mañana, para acompañar al Pontífice “en este día tan especial”. “Con la edad que tengo he visto a muchos Papas aquí en la plaza”, dice, con los ojos vidriosos. “Nunca había visto que un papa saliera a saludar al público antes de la misa. Para mí ha sido extraordinario”, añade. Ha podido ver pasar el ‘papamóvil’ muy cerca y relata su experiencia con emoción: “Lo he tenido a pocos centímetros y he notado muchísima paz y mucha espiritualidad. Me siento emocionadísima”, dice. También explica que tiene muchas esperanzas puestas en este pontificado. “Espero que haya mucha más fe, que atraiga mucho más a las personas que se bautizaron, pero que no practican, que no hablan de Jesús, que pueda evangelizarnos mucho más y que haga montañas de seguidores, que llevemos la palabra del Señor por donde sea, a donde sea y con quien sea”, apunta. Y pide, con alegría que se dedique una jornada mundial a los jubilados, como ella: “A los que somos mayores nos encantaría tener una JMJ, pero de los jubilados. Yo fui a tres JMJ, y con el papa Francisco, la gente decía: ‘Somos la juventud del papa’, y cuando lo tuve cerca, yo pensaba: ‘Soy la jubilada del papa’. Ahora los jubilados somos más jóvenes, y podemos viajar y estar cerca del Papa”.
La multitud de la plaza es coral, hay personas de todas las edades, desde niños hasta ancianos, se escuchan idiomas y acentos de todo tipo y se ven banderas de numerosos lugares. José Javier González Pacho ha venido desde León, España, con su esposa Belén Matilla y su hijo Juan Carlos. Han venido a pasar el Jubileo de las Cofradías con su Cofradía del Dulce nombre de Jesús Nazareno, fundada en el año 1611. Relata con emoción los recuerdos de la procesión, el concierto y la misa del día anterior y esboza una sonrisa mirando a su familia: “Estamos súper felices de coincidir con la primera misa de pontificado de León XIV”, dice. “El Papa pasando entre nosotros ha mostrado una expresión dulce, parece muy inteligente, reúne características científicas, culturales muy importantes y atesora muchas experiencias y por lo tanto tiene una visión estupenda para hacer una gran obra y para ayudar a todos los cristianos. Pensamos que va a ser un Papa estupendo”, señala Belén. “Yo estudié en los agustinos y me pilla con el corazón muy cercano, así que no soy muy imparcial, pero me ha encantado”, responde su marido. Su hijo Juan Carlos señala que León XIV le recuerda “a todos los Papas anteriores”. “Espero que siga su línea, guardando la tradición, pero también estando atento a los tiempos de ahora y espero que acerque a la Iglesia a los pobres y que nos una a todos”, dice.
Alexander es de Nicaragua, lleva ocho años en Roma junto a su esposa Damaris y sus dos hijas. Resguardados del sol bajo un paraguas escuchan con ilusión las palabras del Papa. “Esperamos que siga el camino del Papa Francisco”, señala y comparte la emoción de vivir este momento en familia. “Tenemos dos niñas y hemos tratado de inculcarles esa fe y ese sentimiento de que es un momento histórico para la Iglesia, que está uniendo a muchos países, a muchos jóvenes, sobre todo a muchos niños”, revela. Su esposa espera que se escuchen los llamamientos del Pontífice por la paz. “Esperamos que siempre trate la parte de la paz y de la unión. Nosotros, siendo un país que está un poco oprimido, esperamos que también continúe llamando a la unión y haciendo conciencia de que la fe es lo único que nos puede unir a todos”, subraya. Pascal Romand es francés, de padre español y madre francesa, y está muy vinculado a la ciudad española de Sevilla. Ha viajado a Roma desde allí con las cofradías que han participado en el Jubileo. “Él nos da muchos regalos”, dice apuntando al cielo, para expresar la emoción que siente por la coincidencia del Jubileo con la misa de inicio de pontificado de León XIV. “Sentimos mucha alegría, le vemos muy cercano a la gente. Pienso que va a ser un grandísimo Papa. Nos da mucha esperanza en el futuro”, recalca. Rocío ha venido con su familia de vacaciones a Roma desde Argentina. “Nunca sospechamos que podríamos ser testigos de un momento así en el Vaticano, para nosotros es una gran bendición”, dice. “Ojalá que León continúe con los pasos Francisco”, apunta su madre Helena. “Esperamos que su camino sea bendecido y que lleve a la Iglesia por una buena dirección”, añade su hermana Guadalupe. Paula es una veinteañera que viene de España junto a dos amigos. “Veo a un Papa cercano, le veo similitudes con Francisco y es algo que a los jóvenes nos alegra porque nos acerca mucho a la Iglesia”, explica, mientras sus amigos asienten, en la plaza de San Pedro, en un punto donde hace unos momentos el Papa León pasó con el ‘papamóvil’. Jesús, explica que es la primera vez que ve a un Papa “desde tan cerca”. “Ha sido emocionante. Transmite bondad, se le ve una persona joven”, apunta. Su amigo Pau resalta que los jóvenes ahora se sienten completamente integrados en la Iglesia y están ilusionados con el nuevo Pontífice. “Asistir a una misa como esta es una oportunidad única”, expone.
(Lorena Pacho)