07 diciembre 2023
Entre las manos la foto de una familia feliz: dos jóvenes padres y una niña de apenas seis años, sobre cuyo rostro el Papa Francisco pasa tiernamente la mano, casi como queriendo acariciarla. Porque esa niña y su madre hoy ya no están: víctimas del drama de las migraciones, fallecieron el pasado mes de julio en el desierto entre Libia y Túnez.
Llevaba esa imagen de colores vivos todavía no desvanecidos en el tiempo, el único superviviente de los tres: se llama Mbengue Nyimbilo Crepin, pero todos lo conocen como Pato, tiene treinta años, viene de Camerún, y en un viaje de la esperanza hacia un futuro mejor ha perdido a la mujer Matyla, coetánea, y a su hija Marie, después de haber sido parados por las autoridades tunecinas y llevados de vuelta al ...
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