En el tiempo de conversión, la oración y el ayuno por la paz

“No tenemos misiles, no tenemos fusiles, no tenemos tanques, no tenemos la fuerza de la violencia que quiere imponerse a cualquier precio. Tenemos la fuerza de la humildad de quien recibe el desprecio del mundo y de los poderosos de la tierra. Nuestra única arma —y en esto nos unimos a nuestro Papa Francisco— ante tanta vergüenza para la humanidad y tanto sufrimiento es rezar”. Estas son las sentidas palabras que pronunció el Miércoles de Ceniza el cardenal Leonardo Sandri, prefecto de la Congregación para las Iglesias Orientales, en Roma, en la catedral del Exarcado Apostólico para los fieles ucranianos en Italia. El vicedecano del Colegio de Cardenales se sumó así a la Jornada de Oración y Ayuno por Ucrania convocada por el Papa, junto con el obispo Paolo Dionisio Lachovicz, ...