“Extra omnes”

Con el ”Extra omnes” pronunciado la tarde del miércoles 7 de mayo por el Maestro de las Celebraciones Litúrgicas Pontificias, el arzobispo Diego Ravelli, antes de cerrar, a las 17.46 horas, el portón de entrada de la Capilla Sixtina, ha comenzado el Cónclave que deberá elegir al 267° obispo de Roma. Antes de entrar, los 133 cardenales electores se detuvieron en oración en la Capilla Paolina, desde donde partió una evocadora procesión hacia la Capilla Sixtina, donde prestaron el solemne juramento. A continuación, tras la indicación del “fuera todos”, una vez que se cerraron las pesadas puertas de la Sixtina, escucharon la meditación propuesta por el cardenal capuchino Raniero Cantalamessa. Cuando esta finalizó inició el procedimiento previsto por la Constitución apostólica Universi dominici gregis para la elección del Pontífice.
Por la mañana, en la misa pro eligendo Romano Pontifice, celebrada en la basílica vaticana, el cardenal decano Giovanni Battista Re delineó las tareas del sucesor de Pedro, marcadas por el “mandamiento nuevo” del amor. Y pidió a los hermanos purpurados electores que elijan con “la máxima responsabilidad humana y eclesial”, evitando las consideraciones personales, teniendo en el corazón la unidad y la comunión, incluso en la diversidad y permaneciendo en la plena fidelidad al Evangelio. “Que sea elegido el Papa que la Iglesia y la humanidad necesitan en este momento de la historia tan difícil y complejo”, deseó el cardenal Re.