Para “subir” del laberinto

En el discurso pronunciado el sábado pasado en el Arena de Verona sobre la guerra y la paz, el Papa Francisco afirmó que cada conflicto tiene algo de laberinto, un lugar donde el hombre permanece como atascado, paralizado, sin poder encontrar la salida. No es la primera vez que el Papa, hablando a los gobernantes de las naciones como a los jóvenes, utiliza la imagen del laberinto. Al final del libro entrevista con Austen Ivereigh ¡Volvamos a soñar! de 2020, por ejemplo, también hizo algunas referencias literarias, como Borges y Chesterton, para explicar algunas cosas: el mundo contemporáneo está cerrado en un laberinto, de hecho, se ha cerrado en un laberinto del que «solo se sale de dos maneras: hacia arriba, descentrándote y trascendiendo, o dejándote guiar por ...