Faltaba la chispa para iniciar el incendio

«Jubileo», para el hombre medieval, equivalía a «indulgencia» y antes de que Bonifacio viii -en el año 1300- anunciara al mundo el gran perdón, la cristiandad medieval nunca había celebrado un jubileo como lo entendemos hoy. Las afirmaciones contenidas en la Crónica del cisterciense Alberico delle Tre Fontane, según las cuales «se sostiene que este año [1208] se celebra como quincuagésimo o jubileo y de remisión», hacen referencia, con toda probabilidad, a la indulgencia concedida en aquella época por Inocencio III a quienes acudían en procesión detrás de la imagen de la Verónica. Pues si se hubiera tratado de un verdadero jubileo, las huellas dejadas en las crónicas y en los documentos ...