· Ciudad del Vaticano ·

Vida, don y misterio

15 marzo 2024
Desde la primera hasta la última página, desde Eva hasta la «Mujer vestida de sol» del Apocalipsis, la Biblia está llena de figuras femeninas. En algunos casos dan con su nombre también el título al libro individual, como Rut o Ester, pero hay en particular una figura de mujer, sin nombre, que llama la atención, se puede decir “hoy más que ayer”, porque destaca por su tamaño y luminosidad a pesar de la brevedad de su aparición en el texto bíblico. Es la figura de la madre de los hermanos Macabeos, en el capítulo 7 del segundo libro dedicado a la dramática revuelta de los judíos, que tuvo lugar en el siglo II a. C., dirigida precisamente por los Macabeos contra el rey Antíoco IV Epífanes de Siria, partidario de la ...

Este contenido está reservado para suscriptores

paywall-offer
Estimado lector:
el acceso a todas las ediciones de L’Osservatore Romano está reservado para los suscriptores.