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Observatorio

Como desmasculinizar
a la Iglesia, la teología de las mujeres y Von Balthasar

 Come smaschilizzare la Chiesa, la teologia  delle donne e Von Balthasar  DCM-002
03 febrero 2024

“Uno de los grandes pecados que hemos cometido es el de ‘masculinizar’ la Iglesia”. Son palabras del Papa, pronunciadas el 30 de noviembre de 2023 durante un encuentro con la Comisión teológica internacional. El Pontífice se dio cuenta de que entre sus invitados había pocas mujeres: “Una, dos, tres, cuatro mujeres… ¡pobres!, ¡están solas! Ah, perdón. Sois cinco”.

“Desmasculinizar” pero, ¿cómo? “Escuchando de verdad a las mujeres, los hombres escuchamos a alguien que ve la realidad desde otra perspectiva y así nos invitan a revisar nuestros proyectos y nuestras prioridades. A veces estamos perdidos. A veces lo que escuchamos es tan nuevo, tan diferente a nuestra forma de pensar y de ver, que nos parece absurdo y nos sentimos intimidados. Pero esta desorientación es saludable, nos hace crecer”, leemos en el prólogo que el Papa ha escrito para el libro, “Smaschilizzare la Chiesa? Confronto critico sui ‘Principi’ di H.U. Von Balthasar”, (¿Desmasculinizar la Iglesia? Comparación crítica sobre los ‘Principios’ de H.U. De Baltasar”) de Lucia Vantini, Luca Castiglioni e Linda Pocher (ed. Paoline).

Es un volumen ágil y precioso que recoge las intervenciones de dos mujeres y un hombre, tres teólogos, a quienes Francisco, inmediatamente después de hablar de desmasculizar la Iglesia, llamó a Roma el 4 de diciembre antes del Consejo de Cardenales que se reunió para ofrecer a sus eminencias “un camino de reflexión sobre la presencia y el papel de la mujer en la Iglesia”. Vantini es filósofa y teóloga, presidenta de la Coordinadora de Teólogas Italianas, laica, casada y madre de tres hijos; Casstiglioni es presbítero, teólogo y vicario parroquial; y Pocher es Hija de María Auxiliadora, filósofa y teóloga, además de profesora de Cristología y Mariología.

El punto de partida fue la reflexión de Hans Urs von Balthasar, uno de los más grandes teólogos del último siglo, quien tematizó el principio mariano-petrino, aspecto espiritual y jurídico que convive en la Iglesia, asumido también por el magisterio de los últimos pontificados.

Lucia Vantini aclara inmediatamente: “Estoy convencida -y conmigo muchas mujeres y también hombres- de que este principio no resista la complejidad del presente y que no podrá llevar a la Iglesia hacia el mañana, ya que compromete una buena alianza entre nosotros, tensa los lazos que tejen la justicia y corre el riesgo de funcionar como una frágil razón para reafirmar la reserva masculina a la ministerialidad ordenada o para agravar la exclusión de las mujeres de los procesos de toma de decisión comunitaria”.

Vantini, que también es miembro de la comunidad filosófica femenina Diotima, nacida con el desafío de “ser mujeres y pensar filosóficamente”, habla de “un desequilibrio que en esta Iglesia grita con voz de mujer” y cita “el techo de cristal: como si los hombres nos recordasen a las mujeres solo cuando el mundo necesita ser reparado o una Iglesia necesita ser revitalizada, pensando en ellas como musas inspiradoras o una parte de diferencia salvífica en un mundo de identidades cerradas”.

Hay trabajo por hacer, más, si cabe, si el punto de partida del Consejo de Cardenales fue Baltasar, y “el punto de llegada está en manos de Dios”, subraya el propio Francisco en el libro.