Una invitación a «no descuidar la importancia de la dimensión espiritual en la educación» porque solo así los jóvenes pueden convertirse en «protagonistas en la construcción de un futuro mejor». Francisco la dirigió a los participantes en el iv Simposio Global Uniservitate, que concluyó el jueves 9 de noviembre, en el ateneo De La Salle de Manila.
En la capital de Filipinas se reunieron durante dos días expertos en el sector de la educación participantes en el programa de promoción del aprendizaje y del servicio solidario en las instituciones católicas de estudios superiores, que se adhiere al Pacto educativo global lanzado por el Papa Bergoglio.
En la apertura de los trabajos intervino con un mensaje de vídeo Antonella Sciarrone, subsecretaria del Dicasterio para la Cultura y la Educación. Al final del Simposio se leyó el texto del Pontífice, que subraya la necesidad de «desarrollar en los jóvenes una mayor conciencia de la relación entre los “lenguajes” de la mente, del corazón y de las manos». De este modo, explica Francisco, los educadores «podrán formar, y no simplemente informar» a cuantos están bajo su responsabilidad, para que «todos aprendan a pensar en armonía con lo que sienten y hacen; a sentir en armonía con lo que piensan y hacen; y a hacer en armonía con lo que sienten y piensan».
Para el Papa, la educación «requiere métodos creativos, interdisciplinarios y transdisciplinarios para ayudar a los jóvenes a ser líderes» en la sociedad. Pero, al mismo tiempo, el obispo de Roma relanza la dimensión espiritual en el contexto educativo, para impulsar a las nuevas generaciones a «servir al bien común como discípulos misioneros, capaces de llevar la verdad transformadora, la belleza y la alegría del Evangelio a los miembros de la familia humana, haciendo avanzar el reino de Dios de solidaridad fraterna, justicia y paz».
Después de las dos primeras ediciones celebradas en modo virtual debido a las limitaciones impuestas por la pandemia de COVID-19, el año pasado el Simposio de Uniservitate se celebró en presencia de Roma, en la Universidad Libre Maria Santissima Assunta (Lumsa). Y la misma universidad también acogerá la próxima edición.