Garantizar a todos y todas el derecho a no tener que migrar

Es necesario «desarrollar propuestas concretas para favorecer una migración regular y segura», sino también «trabajar duro para garantizar a todos y todas el derecho a no tener que migra». Lo escribe el Papa Francisco en un mensaje difundido en la mañana del miércoles 25 de octubre - a los participantes del viii Festival de las migraciones, que se celebró en Módena y en otras ciudades cercanas, desde el 25 al 28 de octubre, sobre el tema «Libres de partir, libres de quedarse». Publicamos a continuación el texto pontificio.

Queridos hermanos
y hermanas:

Os saludo a todos vosotros que participáis en la octava edición del Festival de la Migración, titulado “Libres de partir, libres de quedarse”. Felicito calurosamente a los organizadores de este importante evento, entre los cuales la Fundación Migrantes de la Conferencia Episcopal Italiana.

El tema del Festival retoma el del Mensaje para la Jornada Mundial del Migrante y Refugiado de este año, dedicado a la libertad de elegir si migrar o quedarse. Y es aún más clara la referencia a la iniciativa de solidaridad promovida hace algunos años por la Conferencia Episcopal Italiana, que cito precisamente en mi Mensaje como respuesta concreta a los desafíos de las migraciones contemporáneas.

En vuestros trabajos queréis reflexionar sobre los flujos migratorios contemporáneos a través de consideraciones que vayan más allá de la emergencia, en la conciencia de que nos encontramos frente a un fenómeno poliédrico, articulado, global y a largo plazo. Por eso las respuestas a los desafíos migratorios actuales sólo pueden ser articuladas, globales y a largo plazo.

Os proponéis reiterar la centralidad de la persona humana en el diseño de políticas y programas migratorios, con atención particular a las categorías más vulnerables, como las mujeres y los menores. En efecto, el principio del primado de la persona humana y de su inviolable dignidad «nos obliga a anteponer siempre la seguridad personal a la nacional» (Mensaje para la J. M. del Migrante y del Refugiado 2018). Y además, «Jesucristo nos pide que no cedamos a la lógica del mundo, que justifica el abusar de los demás para lograr nuestro beneficio personal o el de nuestro grupo: ¡primero yo y luego los demás! En cambio, el verdadero lema del cristiano es “¡primero los últimos!”» (Mensaje para la J. M. del Migrante y del Refugiado 2019).

Os animo a desarrollar propuestas concretas para favorecer una migración regular y segura. En esta línea, «es necesario multiplicar los esfuerzos para combatir las redes criminales, que especulan con los sueños de los migrantes. Por eso, es necesario comprometerse para ampliar los canales migratorios regulares» (Reflexión en el Momento de oración por los migrantes, 19 de noviembre 2023).

Pero al mismo tiempo es necesario trabajar duro para garantizar a todos y todas el derecho a no tener que migrar. «Los migrantes escapan debido a la pobreza, al miedo, a la desesperación. Para eliminar estas causas y acabar finalmente con las migraciones forzadas es necesario el trabajo común de todos, cada uno de acuerdo a sus propias responsabilidades. Es un esfuerzo que comienza por preguntarnos qué podemos hacer, pero también qué debemos dejar de hacer. Debemos esforzarnos por detener la carrera de armamentos, el colonialismo económico, la usurpación de los recursos ajenos, la devastación de nuestra casa común» (Mensaje para la Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado 2023).

El Señor bendiga vuestros trabajos y, por intercesión de María Santísima, sostenga siempre vuestro compromiso de acoger, proteger, promover e integrar a todos los migrantes y los refugiados que llaman a nuestra puerta.

Roma, San Juan de Letrán, 23 de octubre 2023.

Francisco