· Ciudad del Vaticano ·

Repetidores del Evangelio

14 abril 2023
Hay una palabra que el Papa Francisco usa con moderación porque sabe su valor y lo salvaguarda, en un mundo, el contemporáneo, que muchas veces consume palabras abusando de ellas y por lo tanto vaciándolas de significado; una palabra que, aunque raramente pronunciada, se esconde, con discreción, dentro y debajo como una fuente subterránea de muchos gestos y discursos papales. Esta palabra es humildad. Una virtud a su manera “esquiva” hasta el punto de no estar contemplada en las listas clásicas, una virtud ambigua, difícil de entender y fácil de malinterpretar, un poco escurridiza y paradójica porque cuando uno cree tenerla, es precisamente el momento en que la ha perdido. Hay que estar de acuerdo con el jesuita François Varillon que, en el íncipit de su ensayo ...

Este contenido está reservado para suscriptores

paywall-offer
Estimado lector:
el acceso a todas las ediciones de L’Osservatore Romano está reservado para los suscriptores.