La imagen de portada es el detalle de una foto (al lado, de Wikimedia Commons) tomada en la calle: monjas entre la gente, en la ciudad, en la vida cotidiana. Debería incluirse en la categoría de fotografía callejera, un género que quiere inmortaliza sujetos, no necesariamente personas concretas, en situaciones reales y espontáneas en lugares públicos precisamente para representar aspectos de la vida cotidiana. También son documentos sociales, hablan de personas y lugares y dan testimonio de ciertos momentos que a veces nos hacen descubrir cosas nuevas.
En redes sociales son muy populares perfiles como @suoragram_ #suoragram. Se nutre de fotografías de religiosas en las más diversas situaciones como paseando por la calle, en transporte público, en el supermercado, en bicicleta, tomando un helado, visitando un monumento o en algún encuentro con el Papa. Un perfil monotemático que bien podría constituir todo un archivo de la vida ordinaria de unas mujeres extraordinarias.