30 septiembre 2022
Ya en noviembre de 2013, en la exhortación Evangelii gaudium que representa la "hoja de ruta" del pontificado, Francisco había hablado de una economía "que mata". "Hoy -escribía el Papa- todo entra dentro del juego de la competitividad y de la ley del más fuerte, donde el poderoso se come al más débil. Como consecuencia de esta situación, grandes masas de la población se ven excluidas y marginadas: sin trabajo, sin horizontes, sin salida. Se considera al ser humano en sí mismo como un bien de consumo, que se puede usar y luego tirar. El mismo ser humano se considera como un bien de consumo, que se puede utilizar y luego desechar. Hemos iniciado la cultura del 'descarte' que incluso se promueve... Los excluidos no son 'aprovechados' sino ...
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