La voz de nuestra gente

Entre las mujeres de las que hablamos hemos elegido a Txai Suruí, la más joven, para la portada, porque su lucha por la protección de la Amazonía tiende un puente entre el pasado y el futuro del activismo medioambiental protagonizado por mujeres. Recoge el testigo de las muchas heroínas, a veces mártires, de la tierra y, al mismo tiempo, muestra gran clarividencia al identificar nuevas formas de combatir la crisis ambiental que la ignorancia del hombre corre el riesgo de agravar. En la lengua materna de Txai la gente se identifica con el término Paiter que significa “nuestra gente”, “nosotros mismos”. Bien puede convertirse en un “nosotros” universal, porque la cuestión de salvaguardar la selva amazónica desafía al mundo entero, no es el problema de “doméstico” de una etnia de mil personas. Se trata de nosotros mismos. Ella tiene el ejemplo en casa. El padre de Txai, el gran cacique Almir, fue el primer suruì amerindio que pudo acudir a la universidad, donde descubrió Internet y la importancia de la web para transmitir la voz de su pueblo y de los pueblos de la Amazonia.